Mejora el sexo con hipnosis ?

La hipnosis puede mejorar las relaciones sexuales. Aunque muchas veces fue cuestionada su base científica, la hipnosis clínica como herramienta…

Mejora el sexo con hipnosis ?La hipnosis puede mejorar las relaciones sexuales.

Aunque muchas veces fue cuestionada su base científica, la hipnosis clínica como herramienta terapéutica cobra cada vez mayor protagonismo. Su auge en el Primer Mundo es tal que la Clínica Mayo acaba de publicar un relevamiento sobre su aplicación en los Estados Unidos.

El mismo concluye que “hay importantes evidencias sobre el uso exitoso de la hipnosis en el tratamiento de numerosas patologías”, entre ellas las disfunciones sexuales.

“La hipnosis como tratamiento de las disfunciones sexuales tiene un componente psíquico importante, la inducción a estados de serenidad y relajación es terapéutica en sí misma” , afirma Carlos Malvezzi Taboada, especialista argentino en Psicología Clínica, director del Instituto Gubel de Investigación y Docencia en Hipnosis.

Destruyendo mitos

Varias entidades médicas argentinas que reúnen especialistas en sexualidad humana han notado que en los últimos años se dispararon las consultas sobre sexo. Y aunque el 80 por ciento de los que van a los consultorios son hombres, cada vez hay más mujeres que buscan su plenitud sexual y no acallan sus dudas.

Esto no significa que haya aumentado la prevalencia de estas patologías, sino que los pacientes se animan a consultar más, especialmente gracias a que la mayor difusión en los medios coloca a estos padecimientos como algo socialmente aceptado.

Las disfunciones sexuales abarcan diferentes formas de incapacidad para participar en una relación sexual deseada. Según los casos, se trata de una falta de interés, una imposibilidad de sentir placer, un fracaso en la respuesta fisiológica necesaria para una interacción sexual efectiva (por ejemplo, erección) o una incapacidad para controlar o sentir un orgasmo. Algunos tipos de disfunción se presentan tanto en varones como en mujeres, por ejemplo la falta de deseo sexual.

Click: BBC – Argentinos ensayan con hipnosis como terapia sexual

Click: Diario Perfil – Hipnosis erotica: nuevos modos de vivir experiencias sexuales sin contacto fisico

“Todo tipo de disfunciones se pueden tratar con la hipnosis clínica, excepto las que tienen un componente orgánico irreversible, por ejemplo problemas de erección debido a una diabetes infantil no tratada o en pacientes con problemas neurológicos graves.»

Pero en la mayoría de los casos existe un predominante componente psicógeno que es lo que podemos tratar con esta herramienta de trabajo terapéutica.

Las consultas más frecuentes son por anorgasmia (falta de orgasmo) y eyaculación precoz, en segundo lugar dificultades en la erección y finalmente por dispaurenia (dificultades en la lubricación vaginal)”, detalla el especialista. ¿Pero cómo es que funciona este método que en la actualidad todavía tiene un dejo de misterio? Ya no se entiende a la Hipnosis como una terapéutica de tipo sugestivo impositivo, característica de fines del siglo XIX o principios del siglo XX, y hoy día estrategias más modernas han reemplazado al mítico péndulo de las películas.

En verdad, la hipnosis es un estado de localización de la atención que todos experimentamos cotidianamente, por ejemplo cuando escuchamos una pieza musical que nos agrada mucho, cuando somos acariciados de alguna manera que nos gusta o bajo cualquier situación que nos introduce en un estado de serenidad, distorsión del tiempo y sensación de placer, en la que olvidamos que nos dolía la cabeza (analgesia), por ejemplo.

La hipnosis hoy es entendida como una modalidad comunicacional en la que la persona en todo momento sabe quién es, dónde está, qué está ocurriendo, no pierde la conciencia de tiempo y espacio y ni el sentido de sí mismo. No tenemos posibilidad de tener el dominio sobre el otro como si tuviéramos poderes especiales.

«Nada emana de nuestras manos ni miradas”, aclara el terapeuta Malvezzi Taboada. Durante una sesión de hipnosis se trabaja con sensaciones, imágenes y vivencias generadas a partir de la palabra y del clima del encuentro. “Si la persona no se siente cuidada por el otro aflora la inseguridad y esto influye en los resultados del tratamiento. Al no estar en un estado de vigilia y alerta permanentes no interfieren mecanismos de defensa y el paciente es el gran protagonista, su labor no es pasiva”, advierte el doctor Malvezzi.

Ensayos para el éxito

En realidad, la hipnosis clínica es una herramienta de trabajo dentro de la psicoterapia, no implica nunca que quien se acerca a la consulta será inmediatamente llevado a un trance y al volver de él habrá resuelto mágicamente su problema.

“Muchos pacientes llegan diciendo, vengo para que me hipnotice para tener una ereccion normal y le decimos no. 
Una disfunción eréctil no es lo mismo para todos, hay personas que tienen tanta ansiedad que quieren resolverlo ya mismo, con ellas es muy difícil trabajar, otras son más pacientes y comprenden que las mejorías son graduales. En un 80% de los casos la hipnosis clínica es exitosa” , explíca el director del Instituto Gubel.

La frecuencia inicial es de dos veces por semana, y luego se va espaciando hasta ser quincenal o mensual. ¿Pero qué le ocurre exactamente al paciente durante la sesión de hipnosis?

La sesión incluye un proceso de relajación progresiva, inducción al trance completamente seguro, uso de metáforas y afirmaciones/visualizaciones dirigidas al cambio que queremos hacer, el proceso de reforzamiento y salida del trance. Básicamente, a través de la palabra, el vínculo con el terapeuta y el clima que se genera, el paciente se repliega sobre sí mismo, alcanza un alto poder de concentración sobre sí mismo y un estado de receptividad que le permite escuchar con mucha más atención que la habitual lo que se le dice.

En ese estado de serenidad, el terapeuta realiza propuestas y sugerencias, no interpretaciones, porque no es el fin de la hipnosis, sino lograr el cambio buscado, el descondicionamiento de las pautas que lo llevaron a la enfermedad.

“Siempre la hipnosis trabaja sobre ideas y experiencias positivas. Por ejemplo, en el caso de una disfunción eréctil, se focaliza no en el problema sino que se evocan imágenes y sensaciones relacionadas con situaciones del paciente en las que su sexualidad fue vital y potente.
En otros casos, por ejemplo, el de una eyaculación precoz, se trabaja sobre la prolongación de la duración a través de la distorsión en el tiempo. Si la sensación dura un minuto nos conformamos, pero vamos aumentando gradualmente
” , ejemplifica Malvezzi Taboada.

La ventaja de la hipnosis es que funciona como un ensayo virtual donde el paciente puede liberarse del condicionamiento que lo lleva al fracaso en cada intento real.

Otras veces se utiliza la hipnosis sin hipnosis, es decir, sin llegar a estados extremos de trance, es un diálogo conducido donde el terapeuta intercala ciertas menciones o anclajes que producen directamente un cambio en el paciente.

Es importante aclarar, que la hipnosis permite una llegada rápida y profunda al interior del paciente, pero no es su finalidad trabajar, como lo hacen otras escuelas, sobre interpretaciones que busquen el cómo o el por qué del problema. Su prioridad es producir cambios en el corto plazo, luego el paciente decide si quiere seguir indagando sobre su personalidad.

También puede ser complementaria a otros tratamientos. Más importante todavía es remarcar que se debe acudir a profesionales de la salud especializados en esta estrategia, con certificaciones reconocidas que ameriten su capacidad profesional.